como hierro que se fundía,y fue tanto el ardor,
gozando en tu gran calor,que en Tí me disolvía,
como el agua que rugía,en medio de tal hervor.
Y ya no supe que era el temor,ya que nada me hería,´
ya que cuando yo gemía,era por sentir tu Amor.
Y al ser tan arrebatador,en mi aislada alquería
por miedo a tu cercanía,me escondí con gran pudor.
Porque tu Amor es tan abrasador,que no puedo ni podría,
como doncella ante hombría,resistir tu resplandor.
Peo aunque seas Creador,tu Gloría yo temía,
pero viví la alegría,de ver tu cálido esplendor.
Y aunque soy sabedor,de tu amorosa varonía,
no sabía si temblaría,en tu abrazo protector.
Y en tu Gloria superior,allí yo me perdía,
pero al final yo renacía,en Tu Amor abrumador.
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